Baño de Damas es una obra que
cuenta con un gran contenido corporal que se puede observar de principio a fin.
La mímica del rostro es el sistema de signos kinésicos mas relacionados con la
expresión verbal. Hay una gran cantidad de signos mímicos impuestos por la
articulación; es difícil diferenciar cuando los actores están improvisando o
siguiendo al pie de la letra el guión. Tratamos de ser los más espontáneos
posibles, cada actor se encargó de profundizar su papel y ver por qué su
personaje realiza ciertos gesto. Por qué la protagonista es tan humilde a pesar
de ser un personaje maltratado verbal y psicológicamente; por qué Valeria
siempre carga cara de tristeza a pesar de estar en uno de los locales más
respetados y aclamados de la ciudad, etc. Con las miradas dicen mucho, crean
tención en el ambiente, la rabia se hace protagonista en la última escena de la
obra, sacando de sus casillas a estas mujeres y demostrando que no son el sexo débil
si no el más complicado. Los signos musculares del rostro tienen un valor
expresivo tan grande que a veces prestamos más atención al gesto que a la
palabra misma.
Muy ligado a la mímica contamos
con los gestos de nuestros actores, siendo uno de los signos más desarrollados y
con el cual se puede experimentar más. Con el podemos crear y comunicar mucho.
Carmen Antonia (la protagonista) se mantiene ordenando el baño, quiere que todo tenga
una buena presentación. El baño es su reflejo, (impecable, ordenado) por lo que pasa la mayoría del tiempo organizandolo. La obra cuenta con una buena escenografia, vasos, copas, maquijalle, cubiculos, etc. Sus gestos expresan sus emociones, llantos y alegrias.
El gesto constituye el medio más rico y flexible de expresar los sentimientos. Al diferenciar el gesto de los demás sistemas de signos kinésicos se considera mas que un movimiento una actitud, expresada con las manos, forma de caminar, los brazos, la cabeza, etc.
La proxemia o equilibrio del espacio trata de como los actores dispondran a usar el espacio del teatro para recrear las escenas de la obra. Del lado derecho del teatro situaremos a Carmen Antonia con una silla y una pequeña mesa, en la que tendra cigarros, toallas, caramelos, papel higienico y periódico. Al fondo del escenario contaremos con dos cubiculos, del lado izquierdo estará la entrada al baño y lo que marcará pauta en la obra será el espejo donde se veran, maquillaran y arreglaran estas mujeres, no habrá espejo, cada persona del público deberá sobre entenderlo e imaginarlo a su manera, las mujeres realizaran estas acciones frente a ellos.
La mímica, los
gestos y movimientos son la expresión corporal del actor, es un signo visual
que el público siempre tendrá presente.
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